september's not so far away...

Septiembre ha llegado y está pasando como se merece. Con prisas y carreras, con mil cosas que hacer y mil obstáculos que superar. Septiembre no ha hecho más que colorear lo que estaba en blanco y negro, encima de lo que ya había porque mi esencia sigue siendo la misma.
Eso sí, septiembre me ha traído un puñado de cosas excitantes.
Reencuentros.
Conversaciones que hacía mucho que no tenía.
No aburrirme.
Tener iniciativa (por lo menos una)
Disfrutar de una boda, inesperada por su premura pero tan especial que nunca la olvidaré.
Disfrutar de toda la preboda (pruebas de trajes de novia, despedida de soltera, organizar sorpresas y regalos, ver en los ojos de todas la ilusión porque llegue ese día, la complicidad).
Planes. Incluso alguna que otra ilusión.
Un par de cosas muy lindas que me dijo ayer Ceci.
Y ahora, ahora que ha llegado septiembre y por fin parece que el calor nos va dejando cierto margen, poco a poco, nos preparamos para el otoño. Para otras costumbres y otras conversaciones y otros escenarios y otras necesidades y otros contextos... que coloreen lo que ya tengo dentro.
Tengo en la cabeza a Field Mice mientras escribo, claro. El titulo es una de mis canciones favoritas de este grupo pero además, en mi corazón y en sus palabras, estuvieron presentes en el evento del año, esa boda que me ha dejado tantas cosas que contar y otras tantas que rememorar en mi cabeza.
Esta portada, además de servir a un disco con un título precioso, es totalmente otoñal, lo son los colores y las canciones. Y lo seremos todos en unos días. Lo queramos o no.
let's call this the comeback...